Los vehículos eléctricos están ya a la orden del día. Si estás pensando en comprar coche, seguro que te has planteado esta alternativa, y si ya lo tienes, quizá no sabes si la normativa es igual al de un coche de combustión.

Los vehículos eléctricos son una alternativa sostenible para una movilidad más respetuosa con el medio ambiente, pero hay determinados aspectos que aún nos generan dudas, como por ejemplo, la ITV.

¿Es obligatoria la ITV para los coches eléctricos?

La respuesta es sí. La ITV es obligatoria para todos los coches, incluidos eléctricos, para certificar que están en condiciones adecuadas para circular y aumentar la seguridad vial, además de controlar las emisiones de gases.

¿Cuándo debes pasar la ITV de un coche eléctrico?

Aunque la periodicidad sigue siendo igual que la de los coches de combustión, aquí te dejamos un pequeño resumen:

  • Coches nuevos: a los 4 años de su matriculación.
  • Coches con menos de 10 años (después de la primera ITV): cada 2 años.
  • Coches con más de 10 años: cada año.

Y, ¿Cuáles son las multas por no pasarla?

  • No llevar la pegatina de la ITV favorable: 100 €.
  • ITV caducada: 200 € y obligación de pasar la ITV de inmediato.
  • ITV desfavorable: 200 €, con obligación de reparar los defectos y pasar una nueva inspección en 2 meses.
  • ITV negativa: 500 €, y el vehículo no puede circular hasta ser reparado y debe ser remolcado a un taller.

Sin embargo, los coches eléctricos si que tienen algunas particularidades a la hora de pasar la inspección técnica de vehículos:

  • Emisiones y ruido: No se revisan las emisiones de gases ni la contaminación acústica, simplificando el proceso. Sin embargo, los coches híbridos y a gas deben pasar esta inspección activando el motor de combustión para medir las emisiones.
  • Motor y transmisión: La revisión es más sencilla, ya que no tienen embrague ni caja de cambios, ni se necesita comprobar el nivel de aceite.
  • Sistema eléctrico: Se añade la revisión del circuito de cableado y el estado de la batería eléctrica.

Recuerda que es importante mantener tu vehículo al día en cualquier ámbito relacionado con la seguridad. Además, en caso de accidente, si no tuvieras pasada la ITV, lo normal es que que la compañía de seguros se niegue a cubrir los posibles daños ocasionados, alegando que podría no cumplirse los estándares de seguridad establecidos.

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